lunes, 22 de diciembre de 2008

Todo un logro.

Tal como viene la vida, a veces se va. Eso pensaba hoy cuando hablaba con una amiga de un suceso nefasto que sucedió hace dos días, un acontecimiento que me descorazonaba, no sólo por lo desolador del desenlace, sino porque te hace ser consciente de lo frágiles que somos, de los peligros que nos pueden abordar...
Sentándome en mis pensamientos, reflexioné acerca del valor que tiene mi vida en esta vida, de cómo el camino que a veces recorremos parece que carece de sentido y que es casi producto del azar; quizás caminar sin sentido es encontrarle sentido al camino. No sé si voy bien o no por mi existencia, pero al menos lo intento.
Y eso de por sí, ya es todo un logro.

No hay comentarios: